miércoles, 28 de octubre de 2015

"RENOVAR EL MUNDO CON LA BARBARIE", POR CLAUDIO JAVIER CASTELLI



DANIEL SCIOLI-MAURICIO MACRI


“RENOVAR EL MUNDO CON LA BARBARIE”, POR CLAUDIO JAVIER CASTELLI



La frase del título, la dice uno de los personajes de la novela “Doktor Faustus”, “Vida del compositor alemán Adrián Leverkuhn narrada por un amigo”, de Thomas Mann, en ella “retoma la leyenda de Fausto, la traslada a la época contemporánea y la dota de nuevo contenido”, fue realizada en Estados unidos, entre 1943 y 1947, en que se publicó, recibió ayuda de personalidades como Ígor Stravinski, Arnold Schönberg y sobre todo Theodor W. Adorno, exiliados en ese país, durante la guerra y los nazis.


Mann hace decir a su personaje, “Así fuimos nosotros a la guerra con entusiasmo, los únicos que a ella fueron con entusiasmo, seguro que había sonado para Alemania la hora secular, que la historia había puesto la mano sobre nuestra frente”.


Claro que lo que nos interesa, es la metáfora, de esa novela, nosotros no criticamos a los votantes de Macri y Vidal, apelando a su ignorancia, que no saben votar, o al fraude, recurrentes en la derecha cuando pierde las elecciones, pero consideramos que se equivocaron, que ninguna renovación del mundo político argentino, puede venir de la mano del neoliberalismo macrista y de Melconián. Este último, desde el Banco Central, fue el ingeniero de la estatización de la deuda de los privados, en el años 82, durante el fin de la dictadura, es decir cuando caía irremediablemente, las ratas aprovecharon para huir, con las arcas llenas.


¿Qué renovación puede venir de la mano de la restricción de derechos, de volver al santo y seña del mercado libre, donde los más grandes y lobos, se comen a los más chicos?; y la argentina, va a volver al endeudamiento, a someter a todo el país, al encadenamiento imposible de liberarse, de aumentar la deuda externa, como lo hizo en la ciudad de Buenos Aires. Si gana Macri van a ser años de plata fácil, explotación asegurada y después estallido social, estallido fácil.
Claudio Javier Castelli


Macri no puede con su naturaleza de empresario nacido al calor del estado dictatorial de los setenta, y plata dulce. En la naturaleza de la derecha, está la exclusión social. Ocurre que el país no tolera otra exclusión. ¿Gobernaran con inclusión? Aunque lo digan, lo afirmen, lo recontra afirmen, no pueden, como el cuento del escorpión, “no pude, estaba en mi naturaleza”, mientras la rana, que somos todos nosotros, nos iremos hundiendo.


¡Qué rejuvenecimiento puede venir de la barbarie neoliberal! Ninguno. Cunde en gran parte del electorado una “santa necesidad” de renovación. Ya sé del hastío, de doce años en el poder, pero Scioli, aparece claramente como prenda de renovación, Macri no. ¿Y el pueblo que lo ha votado?, muchos votos peronistas, esperaran que Macri ¿defienda los derechos sociales?


Tengo la impresión que el pueblo, o gran parte de él, se ha entregado “Como oveja a la muerte fue llevado; y como cordero mudo delante del que lo trasquila. Así no abrió su boca” (Hechos, 8:32).


Por sus “frutos los conocereís”, a poco de asumir harán una devaluación terrorífica, que implicará una transferencia de ingresos de los trabajadores a la minoría expoliadora. La justificaran con discursos de la pesada herencia kirchnerista, la necesidad de un ajuste. Es mentira, es pura ideología, la economía debe cerrar con la gente adentro, si cierra con una minoría, y para el resto efecto derrame, vamos a estar en problemas serios. Nunca una transición política económica se realizó tan normal y seriamente, y con los mejores indicadores económicos, públicos o privados.


Quien esto escribe, y muchos más, vamos a defender las conquistas, de estos doce años.


Hemos dicho en otro artículo, que el neoliberalismo es un fenómeno criminal, por los escandalosos efectos que provoca en la población, con su cuota enorme de desocupados, crecimiento exponencial de la pobreza, concentración económica, exclusión social y represión política. Porque no nos engañemos, el combo, viene con represión política, de lo contrario no van a poder imponer sus delictuosas ideas.


La Alemania nazi, quiso renovar el mundo con la barbarie, los peronistas, radicales, independientes, izquierdistas, van a renovar el mundo político con el neoliberalismo, ideas que fracasaron estrepitosamente en los noventa.


Como el músico de la novela de Thomás Mann, que entrega su alma al diablo, para extremar su talento, gran parte de los votantes depositaron su confianza, al “zorro del gallinero”, que es Macri.

Tenemos una última posibilidad de no hacerlo, y votar por una renovación Sciolista, dentro de un país con inclusión social, límites al poder económico, justicia social. Todos principios que también nacen de una sana lectura de la Biblia judeocristiana, que raigalmente esta en nuestra cultura.

Hay una gran contradicción entre ser cristiano y neoliberal.


Muchísimo hay que mejorar, para ampliar derechos, hacer un país más justo, renovar políticos, sólo puede hacerse ello siguiendo a Scioli.


De la mano de Macri es un salto al vacío neoliberal, un salto al vacío, en un país, que llama en su constitución “a todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino”, como recitaba Raúl Alfonsín, en la mejor tradición Yrigoyenista. Perón e Yrigoyen, son de una misma matríz. Macri es de la Matriz de Buenos Aires, contra el interior, de la matriz unitaria, y sangrienta con los caudillos.


En los noventa imaginé una reunión en el Club Americano, de empresarios, banqueros, economistas y políticos neoliberales, brindando con Whisky importado, y pegando, con palos de golf, a gente en situación  de  calle, y pobres elegidos al azar, mientras Frank Sinatra cantaba “New York, New York”.


De vos depende: volver a estar de rodillas, o dignamente parado.


Octubre de 2015.

Claudio Javier Castelli.

No hay comentarios:

Publicar un comentario