lunes, 19 de enero de 2015

Las fuerzas ocultas por Roberto C. Suárez

Las Fuerzas Ocultas es una película francesa antimasónica estrenada por primera vez el 10 de marzo de 1943 en París y que si bien es realmente mala, mentirosa y por ello burdamente tendenciosa, bien me sirve para iniciar estas líneas.

En sentido amplio la expresión "gravedad institucional" comprende aquellas cuestiones que exceden el mero interés individual de las partes y afectan al de la comunidad. Pero en sentido estricto, la gravedad institucional, importa además la evidente distorsión del funcionamiento de las instituciones básicas de la República, afecta de manera inmediata al interés general, pues la comunidad entera, que se encuentra organizada bajo el sistema Republicano y Federal, se ve perjudicada ante circunstancias incompatibles con ese orden institucional pactado en base a la Constitución Nacional y Constituciones Provinciales. Por lo general, este supuesto gravoso para la vida institucional del país o las provincias, se relaciona con serios conflictos entre los poderes del estado o con una realidad actual que ponga en riesgo los objetivos primordiales del Estado de Derecho, como la paz social y la convivencia armónica de los ciudadanos.
La muerte del Fiscal sin duda impacta en nuestras instituciones, importa uno de esos acontecimientos que quedarán gravados en la memoria colectiva.
Dice la calle (guiño un ojo) - “...se le habían asignado diez custodios, para su guarda pero no alcanzaron...” - “Ninguno de los custodios escuchó el disparo...” (y ahora todos somos expertos en ipp...)
Si se mató o lo mataron, es casi evidente que la muerte perjudica en la primera linea al Gobierno Nacional, por ello, la gravedad institucional es patente. Esta muerte, como todas es absurda, y además es el peor escenario para la República y para sus magistrados.
Hay que ser realmente idiota para pensar que el propio gobierno pudo estar detrás de esta tragedia.
Pero atención, el tratamiento que podría estar dándose desde los canales oficiales por parte de las segundas y terceras líneas podría ser el menos esperado. Nobleza obliga.
Para terminar, es menester que en estas horas de tanta gravedad institucional, no caigamos en la tamaña boludes de desconocer que tras las sombras, también operan otros poderes ocultos, justamente "Forces Occultes", que desde hace veinte años vienen trabando investigaciones. (Y que por cierto, no se asemejan en nada a las del guión de la pueril película que citábamos arriba, aunque el título hoy nos cuadre a la perfección).

Opinemos con un mínimo criterio y con respeto, y por favor no seamos pueriles en nuestras manifestaciones, amparados en el anonimato de internet.

domingo, 18 de enero de 2015

La base estaba por Roberto C. Suárez

"The Man Who Would Be King" (1975) es una película británica de 1975 basada en el cuento homónimo de 1888, escrito por Rudyard Kipling, fiel exponente del cine y de la literatura colonial.
Una lectura de muchos de los pasajes de "Bases y Puntos de Partida para la Organización de la Política Argentina" (1852) del jurisconsulto, político y escritor tucumano: Juan Bautista Alberdi, nos deposita con espanto en el pensamiento colonial de mediados de siglo XIX, de uno de acá, que soñaba que era de allá o que por lo menos, operaba para los de allá, vale decir, a favor del centro occidental: Europa, por sobre los intereses locales de la empobrecida periferia: América Latina.
Sólo el relato hegemónico oficial argentino, pudo aquilatar las "Bases", obra que no es más que el eco literario de un modelo de país (el que en definitiva se impondría después de Caseros y con el fin de las montoneras), de cara a la Europa del progreso, de las artes y las ciencias, impulsados con el vapor del colonialismo y que implicaba el exterminio desalmado de una nación originaria y de gauchos.
Sin perjuicio de los errores conceptuales en los que incurre Alberdi (se podrían escribir volúmenes al respecto), se nota que además el hombre, desconocía supinamente los engranajes más elementales de la economía globalizada, del poder del capital y en definitiva del combustible que movía los motores de los imperios europeos.
Decía el tucumano "nosotros no tenemos fabricas, ni marinas, en cuyo obsequio debamos restringir con restricciones y reglamentos la industria y la marina extranjeras que nos buscan por el vehículo del comercio.", lo cual demostraba que no había entendido las políticas proteccionistas del "gigante del norte", base por cierto de lo luego sería su gran desarrollo industrial.
Alberdi entendía que el impuesto aduanero, era un impuesto a la civilización, suponía locamente que la inexistencia de regulaciones en materia económica, depositaría mágicamente un desarrollo en nuestro país, derramado como cascada de la vieja Europa que solamente vomitaba excluidos.  
Estaba claro que su esencia no era latinoamericana (o lo era de un tipo que implicaba la negación de lo latinoamericano), gran defensor del robo de california, aseguraba que dichas tierras se encontraban mejor bajo las riendas norteamericanas, quienes sabrían explotar el oro, bajo la ley de la libertad, único medio para construir un estado civilizado y floreciente, patrimonio que no podía ser mejicano. 
Aborrecía lo argentino y lo latinoamericano, no se sonrojaba cuando decía: "La instrucción primaria dada al pueblo fue más bien perniciosa. ¿De que sirvió al hombre del pueblo saber leer?".
Alberdi no entendía que América era en sus tiempos el resultado del saqueo colonial de la Europa globalizadora que tanto admiraba, y justamente en torno a la supuesta "Acción civilizadora de Europa en las Repúblicas de Sud América", decía sin descaro:  "Las Repúblicas de la América del Sud son producto y testimonio vivo de la acción de Europa en América. Lo que llamamos América independiente no es más que Europa establecida en América; y nuestra revolución no es otra cosa que la desmembración de un poder europeo en dos mitades, que hoy se manejan por sí mismas.", desconociendo que en América había pueblos, cultura y un derecho inalienable a la autodeterminación.
Sin duda Alberdi fue un fiel exponente del colonialismo de mediados de siglo XIX y su obra refleja claramente las ideas de un hombre que siendo oriundo de la "Argentina Tucumanesa", sin empacho afirmaba: 
¿Quién conoce caballero entre nosotros que haga alarde de ser indio neto?
¿Quien casaría a su hermana o a su hija con un infanzón de la Araucanía y no mil veces con zapatero inglés?.
Como decíamos arriba, se podrían escribir volúmenes completos sobre las zonceras de Alberdi, -por cierto esta nota no pretende ello- solamente hemos querido destacar a muy torpes trazos algo de un pensamiento de un hombre que ha sido considerado por la historia oficial como el pensador argentino más importante de su tiempo (sólo la historia oficial Argentina...) y que desde el 29 de agosto de 1958 -para ser más exactos- fecha de su natalicio, se celebra nada más y nada menos que el día del abogado, en otra prueba cabal de que los letrados cuando queremos, podemos ser el hazme reír de la posteridad nacional y bien intencionada. 
Tampoco es casualidad este mojón de la revolución fusiladora, ya en los tiempos de don Arturo Frondizi. 


miércoles, 14 de enero de 2015

Los conjurados contra la Revolución Francesa por Claudio Javier Castelli


OBERTURA DEL 2 DE Junio de 2021:


“he conocido otra ciudad que también se llamaba buenos aires”

 

Esta nota se escribió el mismo día de la denuncia de Alberto Nisman, y anticipaba el mundo que venía después. Como es que este humilde bloguero se dio cuenta y en los medios no se presagió; acaso porque en este país se vive sumido en la coyuntura política periodística y no hay tiempo para mirar afuera del país. También porque en Página12 cansan con Larreta y sus avatares –como si fuera un diario meramente capitalino- y no se preocupan por tener analistas internacionales. Como si estos no fueran importante. Perdón, este país es una Semicolonia como lo caracterizó Jorge Abelardo Ramos en sus libros que fundaron la izquierda nacional, y el pulso de las potencias vibra en su interior, amén de los periodistas pagos por la “Embajada” que están en todos los medios. Para colmo nuestra oligarquía es tan servil con los anglosajones y tan “guapita” con nosotros y los “cabecitas negras” que es muy previsible lo qué van a hacer si son nuevamente gobierno. Lo mismo que hizo Macri y peor, y agitando de nuevo otro “Lafware” y van a contar –no se equivoquen con esto- con la complicidad de la Justicia Criminal Federal de Capital Federal y todo el país. No se confundan con esto. Hay una cuestión que es irremediablemente de clase en la composición de la “familia judicial” siempre proclive a rendirle pleitesía al poder económico. 

Muy acertado Eugenio Raúl Zaffaroni en la perspectiva del Juicio Político a la Corte Suprema de Justicia, al menos cambiando la cabeza pueda atenuarse lo que no puede evitarse. Además los Jueces Federales con un sueldo de seiscientos mil-setecientos mil pesos tienen mucho que perder y son en su gran mayoría “cagones de clase media” se impresionan cuando la oligarquía pone en marcha el aparato Embajada-poder mediático-Judicial. Y el lawfare además está en la naturaleza de la persecución a los gobiernos populares a lo largo de la historia judicial y política de la Argentina. 

Todo conspira contra nosotros; por eso desde este blog criticamos tanto los buenos modales de Alberto Fernández porque también criticamos al “peronismo de capital” si es que existe algo que se llame así. Es un peronismo “burgués” y sin trabajadores. Se imaginan lo difícil que va a ser conquistar esta ciudad. Por mí parte ya sé que la perdimos, esta vieja nueva ciudad no nos pertenece, nos expulsa. Digo como Borges: “he conocido otra ciudad que también se llamaba Buenos Aires”. 

Quién les habla militó en el año 1982/83 en la vieja Unidad Básica de Pueyrredón y Santa Fe, en poco tiempo huyó despavorido. No hay algo más desvaído que el peronismo de clase media que no tiene componentes plebeyos, es más los rechaza, para colmo, como dijimos: “burgués” y sin trabajadores. La mayoría de los gestores ministeriales del gobierno actual provienen de ahí. “Qué se vengan los niños” cantaba el Cuarteto Zupay en los albores de la democracia recuperada, decimos “que se vengan los plebeyos” al gobierno de Alberto; más conurbano por favor y más provincianos. Suponemos que habrá renovación después de las elecciones.

Y en página paren con Larreta. No es que esté mal lo que ocurren que desde ahí no tiran muchas ideas y cansan. La característica de esta época neoliberal es el hastío por eso blog como el "Cohete a la luna" y otros se vuelven tan imprescindibles.

Volvamos a la nota que sigue: no se dice nada raro que hoy no sepamos; cualquier lector atento de este país lo escribe mejor, pero Israel opera en tándem con el imperio y casi siempre Inglaterra y Europa. El "lawfare" también se engarza en la lucha contra el “terrorismo” como es la amenaza populista para ellos.

Hoy, Irina Hauser, en página –precisamente- cuenta el pedido del Fiscal Colombo con referencias a las visitas a “Olivos” de Borinsky y Hornos, lo que habría que investigar son las visitas a la Embajada que tiene que haber habido. Nunca me olvido que Mariano Borinsky –que se iniciara en la misma cátedra penal del hablante, David Baigún- se transformó en stock del poder económico anglófilo por supuesto. Nunca me olvido tampoco, y no puede ser más vergonzoso, que el nombrado presentó su pésimo proyecto de Código Penal en los Estados Unidos. Estos datos nunca deben olvidarse. Una vez que lo aprobaron allí se lo ofreció al nene de papá: Mauricio Macri. Aprendió rápido Borinsky, primero al imperio y después en la Argentina. Seguramente le echaron agua bendita (posiblemente por las figuras típicas que verbalizaban las protestas sociales) a un Código Penal, que se va a perder en el túnel de las inutilidades.

Basta de alharacas y vamos al texto:




Los conjurados es el último libro de poemas de Jorge Luis Borges (Alianza Editorial, Madrid 1985).

 El libro tiene su primer poema "Cristo en la Cruz", cuyos dos últimos versos dicen:

"¿De qué puede servirme que aquel hombre haya sufrido, si yo sufro ahora?".

En los noventa discutiendo con filósofos posmodernos hacía una paráfrasis diciendo:

"¿De qué puede servirme que Dios haya muerto si yo creo ahora?".

Era tomado en solfa. Dios no parece haber muerto, lo que Nietzsche había prefigurado (según nos lo explica Heidegger, "La frase de Nietzsche "Dios ha muerto", Caminos de Bosque, Alianza Editorial, Madrid 1984) era la muerte del mundo supransensible, que desde Platón, el helenismo y el cristianismo era el único mundo real. "La frase "Dios ha muerto" significa que el mundo suprasensible ha perdido su fuerza efectiva. No procura vida. La metafísica esto es, para Nietzsche, la filosofía occidental como platonismo ha llegado al final" (Ibid, pag 196).

Lo que había muerto era la idea de Dios como capaz de aunar potencia para desencadenar un discurso lógico, y estimular una conducta de vida.

En realidad Hegel lo había anticipado primero (Fe y Saber, 1802), "El sentimiento sobre el que reposa la nueva época es el de que Dios mismo ha muerto", pero lo decía en el sentido que la idea lógica había ocupado su lugar. Mas adelante en publicaciones que hicieron "los amigos del difunto", se publicó las "Lecciones de Filosofía de la Religión", donde considera al Cristianismo, como la religión revelada, donde Dios se hace hombre, ese detalle la hacía consumada. En la encarnación, está la mayor victoria del Cristianismo.

Nietzsche y Hegel no dicen lo mismo, pero ambos notaban que el cristianismo en las sociedades europeas, quedaba como residuo, como una afirmación con imperativo categórico Kantiano, como afirmación judaica, pero no había nada detrás.

Se hicieron seminarios, libros, Dios ya no engaña a nadie. Fue la época que volví a mis raíces cristianas, ante el desbarajuste del "Fin de la Historia".

"La guerra del golfo no ha tenido lugar", había escrito unos años antes, Jean Baudrillard. Había sido un espectáculo televisivo, sin muertos. Como la actual guerra de Irak o de Libia. Horacio González reflexionaba, hace unos días en Página12, sobre el significado de las imágenes, para los cristianos y musulmanes. Y la simbiosis del símbolo, con una masacre, frente al asesinato del policía musulmán en el piso.

Dios no parece haber muerto. No sólo goza de buena salud, sobre todo en lo que se denominaba "tercer mundo". Sino que vuelve como estandarte cultural (Estados Unidos, Europa), a desafiar, ese último poema del libro de Borges, "Los conjurados", que desde el centro de Europa estaban conspirando: "Han tomado la extraña resolución de ser razonables" "Acaso lo que digo no es verdadero; ojalá sea profético". Exacto Borges, no es verdadero, es sólo profético. 

Como el profeta Isaías condenaba el extravío de Israel, así tenemos que gritar, desde este "arrabal sudamericano", verdadera isla en occidente de la defensa de los derechos humanos, que están conspirando, "uniéndose muchas personas o cosas contra alguien, para hacerle daño o perderle", es uno de los sentidos de conjurar.

Pero a quienes van a ser daño no es sólo a los musulmanes, sino a todos los derechos emanados de la Revolución Francesa, so pretexto, de la lucha contra el terrorismo. En el pentágono, en la CIA, están decididos a no declinar sin resistir a muerte, sin tirar brulotes contra la famosa libertades del liberalismo político, con efectos de bumerán, sobre la credibilidad, el prestigio y la moral, que según Maquiavelo, el príncipe siempre debe tener de su lado.

Uno de los principales e iniciáticos teóricos contra la Revolución Francesa fue Edmund Burque, le siguieron muchos. En el pensamiento conservador alemán está Carl Schmitt. Los matices de este pensador, sobre todo su concepto de lo político, ha tenido una enorme influencia en las revoluciones latinoamericanas, para ampliar la democracia, en la recuperación de derechos universales.

Pero tiene un lado malo, si se utiliza su libro "Teología política" y su decisionismo estadual o el Estado como Dios cristiano para restringir derechos de las mayorías populares. Dios Cristiano que se ha convertido en mercancía, porque todo valor, tiene un equivalente económico.

En Estados Unidos han perdido el sentido común, de los derechos humanos, sancionados en la declaración del 10 de Diciembre de 1948. Declaración de derechos humanos, contra los cuales la demócrata Hannah Harendt estuvo en contra, así como del movimiento de los derechos civiles en Estados Unidos, tomaba la discriminación contra los negros como algo natural.
Alguien puede creer que la denuncia de Nisman, asiduo concurrente a la Embajada de Estados Unidos, no se enmarca como un dislate dentro de esa lucha global y demencial contra el terrorismo, y el día después de la masacre en Francia, con la revitalizada guerra. El prólogo de Sábato al primer Nunca más, es aplicable para entender terrorismo, que se responde con terrorismo.

Es evidente que se quiere perjudicar a la gran electora (Cristina), dado que la corrida contra el dólar, también estimulada por la Embajada fracasó, y la oposición no crece en las encuestas. La caída de Argentina sería un golpe mortal al proceso latinoamericano.

Nisman hoy representa la Corporación Judicial, con muchas dificultades desde el año 1983, para entender la lógica de la democracia, y menos en su propio seno. Lamento avisarle al Poder Judicial, que la lucha está desatada, y no ha de cejar, por los privilegios, que jueces rancios no quieren perder.

Pero Nisman además se deja evidentemente presionar por la Embajada, el Mossad, y los excluidos de la Side, hartantés intrigantes permanentes en Comodoro Py.

No es tiempo de tibios en Argentina, Latinoamérica y el mundo "Occidental" (Estados Unidos y Europa).

Cómo empezamos a extrañar, desde ahora a Cristina, para ese mundo "nazifascista" que avizora en el horizonte.

domingo, 11 de enero de 2015

UÑA RAMOS, UN ENERO DE 1984 por Claudio Javier Castelli

Uña Ramos
Era un enero como este de hace 31 años, Alfonsín y la democracia habían vuelto en el país. Quise llegar a Cuzco de Mochilero pero me cautivó la belleza de la quebrada de Humahuaca, y ese viaje en tren de Villazón a La Paz, Bolivia. De alguna manera era un viaje a mis raíces, las raíces latinoamericanas negadas por los militares argentinos, que tenían la obsesión de ser occidentales y cristianos, y supuestamente, los argentinos, o Buenos Aires propiamente no tenían nada que ver con los Latinoamericanos. Con los Uruguayos sí, por Punta del Este.

Los "terroristas apátridas" venían a quebrantar "nuestro estilo de vida". Así repiquetearon en los oídos de los argentinos, esos espantosos ocho años.

Hice en Tren, desde Buenos Aires, hasta Tucumán, y desde ahí: dedo.
 

Para un aporteñado hijo del litoral, Tucumán fue mi primer choque, con "algo profundo que viene de más arriba". Como un viento.

En Tilcara entendí todo. Como se destruye y se neutraliza una cultura. Pero entendí algo más cuando desde un barcito oí la música de una quena infinita. Tenía un sonido irrepetible, pero que curiosamente con un tanguero de escucha, encontraba, sentimientos, sensaciones, vivencias, de algún bandoneón perdido. La música venía de una casetera con parlantes amplificados. El intérprete Uña Ramos, el casete: "La magia de la quena". El tema que a la sazón pasaban era una zamba: "Mercedes", que el autor residente en París desde principios de los setenta le había dedicado a Mercedes Sosa. Pero había algo más en esa quena, un dolor profundo, una nostalgia, que no se reconcilia nunca con nada. Como alguna vez me dijera Felix Luna, en una carta por un libro de poemas que le mande: "Un temblor muy argentino". Eso había en la quena, un temblor muy argentino.

El viaje fue de un mes, gran parte en el norte argentino, y otra gran parte en Bolivia, donde la belleza natural me hizo encontrar con algo nuestro, que nos habían robado los militares, con la música en ingles permanentes en las radios de aquel entonces. Ahí, me encontraba con que "el destino sudamericano", era más que un mero destino final, de un poema excepcional, de Jorge Luis Borges, sino un caminar juntos que la vanidosa Buenos Aires siempre nos sustrae.

Curiosamente Uña Ramos nacido en Humahuaca, tuvo que dejar su tierra donde era muy poco conocido para gozar de un prestigio internacional en París. Pienso en Juan Manuel de Rosas, con su destierro en Inglaterra. Pienso en San Martín en Francia, en los miles de exiliados, que entonces empezaban a regresar, como observando los pasos que iban a dar. La argentina suele ser muy dura con sus hijos.

"Una quena en la noche", es un descubrimiento del instante, de lo repentino del asombro, del dolor de la soledad inmensa de esas montañas antiquísimas donde los Incas hicieron su imperio, pero esa quena en la noche, era una sutil venganza, un triunfo glorioso e inefable de la palabra ausencia.

"El gringo" un tema dolorosísimo. Como me duele esa quena, me retrotrae en una anamnesis platónica, a un país del pasado, pero es el futuro, que es presente, y nos esta dejando ahora.

Recuerdo que parte del viaje, lo hice con una pareja de norteamericanos que hacían dedo y estaban sin palabras contemplando aquella belleza. ¡Cuánto discutí con el yanqui, por Nicaragua en noches largas!

"Aquellos ojos grises" es quizá el tema más conocido de Uña Ramos. Tuve que viajar al norte, para conocer a un entrañable argentino, que hacía años vivía en Francia. Las radios de los militares me aturdieron con Fiebre de un sábado por la noche, con "Bee Gees".

Ahora, en este presente, en este enero, que nos preparamos para viajar a Villa Gessel, viene este recuerdo de un viaje al norte, y de Uña Ramos.

Era enero de 1984. Otro país. "Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos".

Que absurdo parece introducir en este texto a Marcelo Tinelli, a los faranduleros de la tele, a Jorge Rial y sus chismes. Una vez, una humorista argentina, dijo que había viajado a París, y había extrañado a Mateyko.

Uña Ramos falleció en Mayo de 2014, en París.

Vaya este pequeño recuerdo para esos músicos inasibles, del linaje de Uña Ramos, una quena de Humahuaca para todo el mundo.




viernes, 9 de enero de 2015

ENTRE "LOS SANTOS INOCENTES" Y "LOS PERROS DE PAJA" por Claudio Javier Castelli

SOBRE LOS CRISTIANOS y LA POLÍTICA, Y LA "REVOLUCIÓN PLEBEYA" QUE HAY QUE HACER EN EL PAÍS

Después de la masacre en la revista francesa Charlie Hebdo, el 7 de Enero de 2015, escribí, en este blog, esta nota que se titulaba: "Entre los Santos Inocentes y los Perros de Paja", relacionando los momentos de humillación vividos en ambas películas, por personajes de las mismas, y sus desenlaces, con la humillación que "Occidente", le ha provocado al mundo musulmán, desde la segunda guerra mundial, hasta el presente. No soy especialista de la Política Internacional sólo un lector atento de las noticias al respecto.

Los temas de esta Obertura son muy autorreferenciales: mis lecturas, mi condición de poeta con los ojos abiertos, y mi experiencia en el Cristianismo, y como Funcionario Público, me permiten contar lo que fui anotando en la bítacora de viaje naviero.

"Revolución Plebeya"

He sido Funcionario Público por más de cuarenta y cuatro años, tanto en la Justicia Criminal de Capital Federal como en diversos Organismos Públicos de la Nación; me creo un Funcionario de carrera por los cargos que desempeñé, y por elección personal; he pasado todos los gobiernos desde la Dictadura; accedí a la Justicia como miembro de la “Familia Judicial”; los cargos en la administración se deben a lo técnico-político.

Creo que tanto en el Poder Judicial de Capital Federal como en lo que se denomina “línea” del Poder Ejecutivo Administrador hay un problema en la composición social de los Funcionarios y empleados.

En el Poder Ejecutivo ese problema acecha en casi todo el espectro, mucho más en el Poder Judicial de Capital Federal. El problema es la composición mayoritariamente de clase de esos Funcionarios y empleados. Las clases medias y acomodadas dan sus mejores hombres para trabajar en el Estado Administrador, y por supuesto, en el Poder Judicial de Capital Federal.

Ya sé que el problema también tiene que ver con la Capital Federal –no CABA- es la Capital de la República Argentina. Si se hiciera un estudio serio podría verse que la mayoría proviene de los barrios acomodados de la Ciudad y la Zona Norte de la Pcia. De Buenos Aires. ¿Y cuál es el problema me van a decir mis amigos si vos también venís de ahí? Es que personalmente rompí con mi propia clase, conozco sus prejuicios, la defensa furibunda de los intereses patrimoniales, su ideología liberal conservadora, sus ignorancias con ropaje de sabiduría, sus altísimas presunciones, su limitado pensamiento en la Nación Argentina, sus dineros en paraísos fiscales, en suma su “Antiperonismo” de raíz, de clase.

Pero son muy buena gente, chicos y chicas de familia, muy buenos esposos y esposas, muy creyentes. Pero son “burgueses” en la cabeza, el corazón, y los intereses. Inclusive buenos amigos y amigas. Qué se yo: José Alfredo Martínez de Hoz también era buena gente; Videla era muy buen esposo; por citar al primero como clase alta, y al segundo como familia bien de Mercedes.

A veces, el amor a lo “popular”, y buenos Psicoanalistas pueden deconstruir los “traumas de clase”, así como lo hacen con los “traumas religiosos”, y otros por el estilo. No todo es “sentirse bien” y hacer lo que uno quiere en análisis, sino que muchas veces también hay que hacer lo que “se debe”.

En los “60” y “70” romper con la propia clase era más común que ahora; ahora parece imposible, son demasiados los beneficios, pocas las recompensas, y no hay muchas ideas para jugarse con todo; los medios hegemónicos hicieron todo lo demás.

Así como hablamos de “Familia Judicial” podríamos hablar de “Familia Administradora”. Fijémonos por ejemplo en el Banco Central República Argentina u otros Organismos y Ministerios. Hagamos estudios, sondeos, sobre las dos familias y vamos a ver los resultados.

¿Se acuerdan la preocupación de Prat Gay por la “Grasa militante” en el Estado?, claro es de ellos el Estado también. ¿Se acuerdan del mismo Prat Gay con los desconocidos de Provincia que se encaramaban en el Poder Ejecutivo como los Kirchner? También consideran que deben ser de ellos.

¿Qué hacer? Hay que hacer una “Revolución Plebeya” tanto en el Poder Administrador como en el Poder Judicial. Más conurbano, más hijos de trabajadores, más provincianos ignotos. Claro que tampoco aseguramos que no sean cooptados por el sistema en esos dos lugares. Pero al menos lo intentamos. 

En la extraordinaria película de Werner Herzog, “Fitzcarraldo”, con el actor fetiche de aquel, Klaus Kinski, el personaje de éste, obsesionado por la ópera, quiere montar un teatro en la selva, y debía pasar un barco por una montaña, además de sortear los saltos del Río Amazonas. Hay una escena donde se produce un diálogo entre quienes iban a ayudar económicamente a la travesía y el enloquecido Kinski, éste le advierte de los saltos en el río, creo que después de pasar el barco por la montaña, el “empresario” le pregunta: -“¿Y usted como lo sabe?”, Kinski contesta: “Porque los he visto”.

Es eso nada más. La travesía de hacer una “Revolución Plebeya”, en el Poder Judicial de Capital Federal y el Poder Administrador, es como pasar un barco por la montaña, y lo de la composición social de los mismos: lo sé porque lo vi. 

Las cosas que uno se arrepiente en la vida es de lo pudimos hacer y no hicimos. Pero ahora lo sabemos. Quieren más pruebas.  Búsquenlas. A mí no me lo contaron, ni lo leí en los libros: -vuelvo a repetir- lo ví.

¿Qué tiene que ver esto con la política internacional? Qué tampoco vamos a tener una adecuada política exterior en este bendito país que glorifique la “Tercera Posición” histórica del General, sino cambiamos la composición social del Ministerio de Relaciones Exteriores.

No es justo que en todo el Estado y el Poder Judicial esté representada en su mayoría por una clase social. Sería conveniente volver a estudiar el tema de las Clases Sociales y sus prejuicios. No es sólo un problema de los medios hegemónicos. ¿Se acuerdan de la lucha de clases? Qué antigüedad no. ¡Qué idea tan caduca! No fue idea originaria de Marx, entremos por ese lado.

Los cristianos y la política

Tuvieron mucha influencia en mi vida un cura y una monja que podría determinar hoy que eran del “Tercer mundo”, comprendí la raíz social del evangelio y el compromiso con los pobres; en esa época eran muchos, fue muy fuerte el “Movimiento de Sacerdotes por el Tercer Mundo”, y el ejemplo público del Padre Mugica; el compromiso de algunos con la “Teología de la liberación”, y de otros con la “Teología del Pueblo”, esta última es la forma en que aquella se adaptó a nuestro país.

Escuché  hablar a mi padre –qué había apoyado el peronismo entre los “40” y “50”desde su catolicismo- siempre bien de las leyes sociales del peronismo y que tenían su origen –según él- en la “Doctrina Social de la Iglesia Católica”. Eso, y mi admiración por los actos populares en la “Plaza de Mayo” en la época del General, más los libros de Jorge Abelardo Ramos, y el ensañamiento de los Jueces de la Dictadura con el movimiento, me hicieron Peronista.

Como Ítalo Luder en el “83”, amagó con la amnistía a los militares me hicieron desertar por un tiempo hacia el Partido Intransigente, junto con otros compañeros. Volví con las promesas de Menem, y porque el poncho me sedujo, prontamente nos traicionó, me quedé en el movimiento como opositor al “Turco”. Y ya nunca me fui. 

Llegué a Marx por el cristianismo y me fui por el cristianismo. Por el cristianismo peronista apoyé a Néstor y Cristina, y por el cristianismo peronista apoyo a Alberto Fernández.

También vi la complicidad de la Iglesia Católica con la dictadura militar, a Monseñor Tortolo, que era Obispo de Paraná, lo conocí en mi casa de La Paz, Entre Ríos. Después lo vi actuar a él, y a muchos otros que daban miedo. Detesto el conservatismo castrense de una parte no menor de la Iglesia Católica. Todo esto me hizo alejar de la misma y me hice luterano; sin embargo nunca volvía a encontrar en todo el mundo evangélico un compromiso social como el de aquellos curas, aunque los hay también en el mundo evangélico. No tuve esa suerte. Por eso del mundo protestante tomo la importancia decisiva de la relación personal con Dios, y del mundo católico la opción por los pobres y el compromiso político.

El mundo creyente de la Argentina es demasiado conservador para mi gusto. Y hace que no me sienta bien en ningún lado. Por eso siguiendo a Lutero hago una interpretación personal de la Biblia. La relación de una conciencia y un corazón con Dios, el compromiso militante en el Peronismo, mi interpretación cristiana de Hegel, así como el diálogo con algunos curas y Pastores Evangélicos, y el papel positivo del Papa Francisco –que vuelve a la raíz del Evangelio-, es la “Religión de mi tiempo”.

Hace estragos en el mundo evangélico la “Teología de la prosperidad”, de cuño angloestadounidense, en casi todas las Sectas protestantes, no tanto en las históricas, pero sobre todo en el mundo pentecostal.

¿Qué puedo decir de ese mundo? Hace poco salió una nota en Página12, de un investigador que había hecho un estudio sobre el mundo evangélico en América Latina.

El reportaje estaba bueno y el libro prometedor. Pero el ultradesarrollo del pentecostalismo no se debe solo, como decía el investigador, a la voluntad decidida de las iglesias de involucrase en política, el sentimiento de elegido de cada de creyente, los  negocios y marketing de las iglesias, sino también  al diseño imperial, desde Nixon, para contrarrestar la teología de la liberación latinoamericana, sobre todo después de la revolución Sandinista y la lucha en El Salvador. Lo sugiere pero no lo dice claramente. 

En realidad La “Teología de la prosperidad” tiene su origen en una interpretación sesgada de Calvino sobre la predestinación. Los norteamericanos interpretaron que si uno es millonario es un predestinado. Que las riquezas en la tierra demuestran que estás bendecido desde el cielo. Para Calvino era un predestinado por Dios a Salvarse cualquiera sea su fortuna.

En el protestantismo tradicional no era muy común involucrarse en política. En la iglesia católica sí, mucho más con la teología de liberación de cuño católico, algo menos con la “Teología del Pueblo”-originada en las ideas del Padre Scannone-. 
  
Comparto con todas ellas la trascendencia de la política y su participación como creyente. Lo que no podido entender nunca, sobre todo después de una lectura atenta de la Biblia, militar en la derecha y por el neoliberalismo económico y político. Es imposible hacerlo con la Centralidad de la figura de Cristo. Digo imposible como infinita incongruencia. Es en definitiva una opción por las riquezas. El Dios Mammón está mencionado negativamente en la Biblia. Se cambia la opción por los pobres por la opción por los ricos.

Es posible también que la militancia atea del socialismo real, y una interpretación aislada de Marx,  así como su adscripción por muchos adeptos de izquierda, pueda haber influido en la elección de esa opción para los creyentes evangélicos. 

Posiblemente porque no exista un partido como el peronista en Latinoamérica, salvo Lula en Brasil.
 
He tratado en otras notas el error de la izquierda, y la militancia atea de muchos, lo que espanta a los creyentes, y es un error porque pueden luchar juntos contra este sistema capitalista neoliberal.

Como sea es un tema complejo. La característica del pentecostalismo es la centralidad del Espíritu Santo y el sentimiento fundamentalista de elegido que supuestamente les da autoridad para actuar sobre todos los temas, y no suelen ser muy formados, la autoridad y el conocimiento vienen directamente del Espíritu Santo según ellos, no en concatenación del estudio y el esfuerzo. 

Otro tema es el fundamentalismo, los más radicales son los pentecostales. 

He estado en contacto con muchos creyentes latinoamericanos de todos los países que integran ese espectro, he compartido lecturas e interpretación de la Biblia, y veo con cierto estupor para el futuro, que los hermanos latinoamericanos tienen un fundamentalismo arraigado, y una interpretación meramente literal de la Biblia. No quiero desmerecer a nadie, es un hecho que he observado en varias iglesias. Ni hablar de los Brasileros. 

Hay que estudiar más sobre el diseño de Nixon y el desarrollo evangélico en Latinoamérica; pero esto no quita que en una iglesia cristiana, cualquiera sea, el creyente recobra una dignidad personal, que muchas veces la política no otorga, sobre todo de aquella política –casi toda- sumida en la coyuntura periodística y esa lógica Argentina de apagar incendios permanentemente-, que conspira contra el desarrollo de políticas estratégicas de fondo. Sólo el mundo empresario, las grandes Corporaciones multinacionales y sus algoritmos, la Embajada enmarcada dentro de la política de la Cía y el Pentágono, tienen pensamiento estratégico.

Un poco, digo un poco, de volver a releer al General y su permanente pensamiento estratégico, obsevar un poco más lo que ocurre fuera de nuestro mundo, es imprescindible para todo el movimiento, más para quienes tienen responsabilidades públicas, no vaya a ser que venga otro estratega de cuño opositor, influenciado por los algoritmos, se convierte en "Duce", y piense por todos nosotros. 

Dilema ¿pensar o ser pensado? Desde este blog intentamos, con rudimentos artesanales en el caso del hablante, y con más recursos los colaboradores, de hacer lo primero.

Basta de alharacas y vamos al texto.


Los Santos Inocentes es una película española dirigida por Mario Camus, se dio en Buenos Aires aproximadamente en 1984, en los comienzos de la democracia argentina, después de tantas humillaciones provocadas por los militares, la película cuenta la historia de una familia de campesinos, a las ordenes demenciales de los estancieros, llega a vivir con ellos, el hermano de la esposa campesina, Paco Rabal, que tenía una deficiencia mental era como un niño. Las humillaciones que provocan los dueños de la estancia son muchas, había un respeto absoluto, una conciencia de ser inferiores. La película tiene un desenlace, cuando el personaje retardado de Paco Rabal estalla cuando uno de los dueños le mata, un pajarito que amaba más que nadie en el mundo. Después de soportar tanto, el personaje estalla con una mascota muerta.

Los perros de paja es una película estadounidense-británica de suspenso-drama de 1971 dirigida por Sam Peckinpah y protagonizada por Dustin Hoffman y Susan George. Es una pareja joven, con una belleza femenina como Susan, que llegan a vivir a una campiña inglesa, huyendo de conflictos en Francia, pero tienen problemas profundos con los vecinos, que humillan al esposo, violando a su mujer. La denigración es larguísima en la película, hasta un final dramático, donde Dustin Hoffman venga las infamias, en escenas de hondo dramatismo.

Me acordé de las dos películas intensamente relacionadas en el desenlace. Las humillaciones y la ignominia son díficiles de tolerar. Vienen a cuento a raíz de la matanza de los terroristas musulmanes que masacraron a caricaturistas y periodistas franceses, que amparados en la libertad de expresión, ofendían a diestra y siniestra. Evidentemente se trataba de anarquistas, que ridiculizan a los políticos, las instituciones, las religiones, pero no ponen énfasis en reirse de los banqueros, economistas, empresarios, petroleros, periodistas, y del poder económico en general.

Mucho se ha remarcado de la mafia de los asesinos pero humillar a un profeta religioso, que es humillado con la complicidad de tu país militarmente no me parece sensato, yo me reiría un poco más del poder económico, y menos de los lideres religiosos. Esa elección de reírme de un líder religioso perdidoso, es una elección política. También puede ser analizada así.

Es casi innecesario, aunque un deber aclarar que no justificamos ninguna acción violenta, y repudiamos duramente el asesinato, sólo tratamos de saber las causas, los motivos, y la corresponsabilidad del estado Francés, así, como de los caricaturistas, que al ridiculizar a un profeta religioso sometido militarmente, después del millón quinientos mil muertos de los norteaméricanos, y europeos en Irak, los mil quinientos muertos asesinados por los israelíes en Gaza, en la última incursión, bombardeando poblaciones civiles, matando quinientos niños, mientras los habitantes judíos de las inmediaciones en cómodas reposeras, miraban el espectáculo de las bombas, festejando, como si fuera un partido de fútbol, podrían no sentirse muy felices con los occidentales, ni con el Estado Francés, que no hace mucho esfuerzos para integrarlos a la vida económica, mientras reina un neoliberalismo atroz.

También fue muy festejado y causó mucha gracia en el mundo árabe la captura vivo de Kadhafi, y su asesinato criminal después ante todo el mundo, muy ocurrentes los franceses.

La industria prejuiciosa del entretenimiento yanqui, donde los malos y los buenos lo son íntegramente, nos puede haber surtido efecto a los occidentales; en realidad como le dedicó Horacio Ferrer a Pichuco, este andaba del brazo de un arcángel y un malandra, es decir en un territorio más humano; demonizar a las personas es para no comprender la demanda que me comprende, porque entonces el demonio tiene todos los males que por suerte no tengo, estoy en paz con Dios y mi conciencia.

A los tuiteros que se creen el cuento de terroristas y libertad de expresión sin contexto histórico tengo otro de Caperucita Roja.

Si ustedes analizan este crimen como un problema entre humoristas-libertad de expresión, y no analizan el millón de muertos por los norteamericanos en Irak, los asesinados por Israel en Gaza, ni por los europeos en libia, me parece que estamos en problemas.

Los europeos de que se ríen, han acompañado en silencio a USA e israél con sus crímenes. Nadie justifica nada. Sólo trato de entender, pero aquí reina el silencio.

Además, no es Europa, el teatro de operaciones de esa tercera guerra mundial desatada.En los teatros de operaciones, en las guerras, no hay mucho lugar para reírse. No se trata de poder reírse de Dios, sino si ese Dios, en que creod me salva del genocidio.

¿Quienes? Se dan el lujo de bajar el precio del petróleo para perjudicar a tres enemigos: Rusia, Irán y Venezuela. Pero antes acordaron con Arabia Saudita, por supuesto. Pero antes se apoderaron de Irak y todas las refinerías, Libia y todas las refinerías. Pero es el mercado, y nada tienen que ver con los terroristas musulmanes matando caricaturistas franceses. Son las petroleras de Texas nada más.No, hay alguien más.

Ültima pregunta, no sera la rapiña de los occidentales y cristianos: el petróleo.

Ahora hay que detener a todos los sospechosos, sobre todo los que me buchonee la Cia, y torturalos para que confiesen que Francia es laica.

Arrancaron bien informado las tapas de los grandes diarios que solo hablaron de terroristas y libertad de expresión, no de Palestinos, para nombrar algunas víctimas nada más. Pero en el reino de la mercancía occidental unas vidas valen más que otras. Francia es primer mundo, enseño a torturar a los militares argentinos, con los métodos que utilizó en la guerra de liberación de Argelia.

No creo que ninguno de los detenidos en Francia, a esta hora, tengan algo que ver con el crimen. No es creíble que hayan olvidado documentación en un auto, con el nivel de entrenamiento que demostraron en la masacre, ajusticiando cruelmente a otro musulmán, que custodiaba la libertad que los injuriaba a todos ellos.

En Francia se va a instalar la guillotina, y las ejecuciones se harán a la vista de los colegas humoristas que caricaturizaran el patíbulo.

Macri pide la vuelta de la guillotina.

Resulta muy festejado en el mundo evangélico de los Estados Unidos la imagen de Jesucristo siendo sodomizado por un califa, que ocurrentes estos musulmanes.

Es muy ocurrente la revista gente poniendo en la tapa a Ricardo Balbin semidesnudo y lleno de sondas, moribundo, eso si que es libertad.

Cuando Bush ordenó la guerra santa contra el islam, después del atentado a las torres gemelas, Septiembre del 2001, me tomé el trabajo de leer íntegramente El Corán, no hay ninguna disposición en él que obligue a matar a otro. Por ejemplo nuestra BIBLIA judeocristiana, en el antiguo testamento hay masacres para los impíos, y hay que azotar contra las rocas a los hijos de los impíos en muchos salmos. Mucho del sionismo terrorista judío, se basa en los mismos escritos Bíblicos. Así, el gobierno actual de Israel.

Los comentaristas a pie de página de La Nación y Clarín, proponen novedosas crueldades para someter en Guantánamo a los terroristas musulmanes. Excelente reacción de la reserva moral de la República.

Panorama

Tal vez la última guerra por la democracia se libró en los campos de España, en la década del treinta; después el mayo de 1968, el último intento renovador de los franceses. Ahora proponen para rejuvenecer al mundo, un comunismo microscópico, un partido neonazi remasterizado, con guillotina incluida, y un neoliberalismo de exportación, con exclusión asegurada de franceses pobres e inmigrantes, para que el estado no los cubra, se entrenen en los países musulmanes, y tenga asegurada la ultraseguridad de la derecha.

No se de que se sorprenden los norteamericanos con la matanza en París, en Estados Unidos, periódicamente un tipo normal exaltado (no un loco), armado hasta los dientes provocas decenas de muertos, en colegios, supermercados, iglesias, etc.. Es el libre derecho a tener armas y usarlas. Está por encima de la vivienda digna. Nuestra civilización es muy superior.

Humillar, explotar, mear sobre los cadáveres como hacen los yanquis, a eso llaman la libertad de expresión, para que las señoras gordas se rian, aquí en barrio norte y recoleta universal. No, me parece que hay un malestar en el mundo occidental. Y ese crimen es un síntoma siguiendo a Lacan en el síntoma, y a Freud en el malestar.

Occidente fagocita toda cultura, porque todo deseo lo convierte en mercancía.

Eso sí, tu Dios tiene que darme la posibilidad de reirme, el problema es que siempre se rien los mismo, y de las mismas cosas.

A mí no me parecen graciosos, y tu derecho, en el contexto de un genocidio musulmán, es el derecho del amo, contra el que, en los santos inocentes y los perros de paja, los humillados es decir los siervos se revelan.

Es duro todo esto, pero más duro es que la muerte de doce franceses sea mercancía en la matanza de un millón quinientos mil iraquíes, mil quinientos palestinos, mujeres y niños incluidos, sin hablar de libaneses, ni mencionar la cotidianidad de los drones.

Soy occidental y cristiano: ¡Cristo sálvame, sálvanos!

sábado, 3 de enero de 2015

GASPARIN Y SU CONJUNTO, EL 31 DE DICIEMBRE EN EL CLUB COMERCIO, por Claudio Javier Castelli

Así anunciaban los autoparlantes recorriendo toda la ciudad de La Paz, Entre Ríos, desde principios del 60, hasta entrados los setenta, los fines de año.También actuaba el 24 de Enero, el día de la Virgen, patrona de la ciudad. Iba todo el pueblo, era una fiesta de un acordeón finísimo que sonaba como una orquesta sinfónica, cuando los parlantes no tenían los adelantos tecnológicos que tienen ahora.

Pero sobre todo era una fiesta popular, intrínsecamente peronista. Muchos, sin embargo, elegían el boliche "Grisú", sobre todo, los "progresivos", que escuchaban lo último del rock inglés y norteamericano, que revolucionaba la música en aquel entonces.
Honestamente yo iba encantado al baile popular, era un acordeón para el Teatro Colón: paso doble, tango, cumbia, folclore, la música del pueblo.



¿Qué habrá pasado entre ese acordeón maravilloso, y la cumbia villera de hoy, pasando por los Wawancó, "el polaco" y Karina.
Cuando vine a la Buenos Aires de la dictadura, y me instalé en Belgrano y Barrio Norte, cómo explicarle a mis amigos, que eran buenos los Beatles, los Rolling, pero a mí me gustaba Mercedes Sosa, Los Tucu Tucu, el tango y todo lo que tocaba Gasparín, que era un desconocido acá.

No se escuchaba el rock nacional en las radios de la dictadura, solamente música en inglés. No teníamos en esa época inglés desde la primaria como ahora, en el bachillerato solamente y se podían elegir dos idiomas. Como no me gustaba la profesora de primer año, porque tenía fama de brava, me anoté los tres primeros años en francés, y solo los dos últimos hice inglés. No sabía inglés, no podía reconocerme en las canciones, solo las tarareaba como el personaje de Capussotto. Me gustaba Gasparín. En las discotecas de Buenos Aires, me hablaban de un fantasma, y no conocían al artista. Pero todo el interior del país lo conocía. 

El rock nacional irrumpió con Malvina, en una semicolonia es así.

En youtube, desde hace muy poco se puede conseguir discos de vinilo de Gasparín, hay uno entero, lados uno y dos, "lo mejor", he pasado noches enteras escuchando ese intenso y virtuoso ejecutor del acordeón. Hoy podemos compararlo, aunque más clásico, con Raul Barboza o el Chango Spasiuk.

Interpreta el tango "LLuvia de estrellas", que pertenece a los tangos fantasía de Osmar Maderna, un adelantado del tango, que increíblemente le quitó en los tres tangos fantasía que hizo ("LLuvia de estrellas", "Concierto en la luna" y "Escalas en azul"), el tono nostálgico habitual del tango, pero Maderna era un pianista eximio, esos tres tangos solo lo pueden interpretar virtuosos: Gasparín uno de ellos.

En el lado uno también interpreta "Noche de carnavales", la antigua canción folclórica del "Chango" Rodríguez, que se remonta a mi primera infancia, "en una noche de carnavales yo la conocí", seguramente debo haber escuchado las versiones de Horacio Guarany y el Chango Nieto, que son las más antiguas, principios de los sesenta.

Otra interpretación antológicas son los pasodoble: "España cañi", "La Estudiantina", "La Virgen de la Macarena", también el afamado "Pasodoble te quiero". Creo que lo primero que aprendí a bailar en mi pueblo fue el Chamamé y el pasodoble. No me entendía con Led Zeppelin, perdón rockeros.

Una canción litoraleña que hacía furor en los sesenta y setenta: "Acuarela del Río", por supuesto que la versión de Ramona Galarza, y Los fronterizos. Pero Gasparín ¡cómo la tocaba!

Cuando la dictadura prohibió los carnavales (Gasparín venía a La Paz, también para los carnavales), se fue esfumando mucho de la pasión popular por esos bailes, cuánto disfruto hoy la restauración de los feriados.

Muchos años después, cuando el país de la juventud, era un "instante, que ahora emerge aislado" (Borges), me crucé en Tribunales, ya abogado, con alguien que podría ser Gasparín, lo seguí, lo paré, nos emocionamos juntos "¡Qué hermoso pueblo!", dijo. Ya no tenía orquesta, y tocaba menos.

También por esos años (1974/75) se estrenó en La Paz, en el Cine Urquiza, la película de Fellini, "Amarcord", ¡cuánto había del pueblo de La Paz en esa película!.

También en otro film de Fellini, más antiguo, "Los inútiles". Allí hay una escena en que los protagonistas siguen bailando al compás de una trompetita, cuando el baile había terminado, todos disfrazados, al amanecer. Algo de esa escena, representamos todos los cincuentones hoy.

Gracias Julio Erman, por ese acordeón maravilloso, y por los más lindos y divertidos años de mi vida.

¡Este 31 de Diciembre, voy a Comercio!.

https://www.youtube.com/watch?v=MatIu_hXn80 

https://www.youtube.com/watch?v=JNvY96D9l18