Vivimos un período de riesgo para la salud de la población debido al Coronavirus. Y remitiéndonos a sus efectos, influye en lo personal, en lo social y en lo político. En este campo surge el freno de la política en el seno de la sociedad que también alcanza a los organismos del Estado, los que siempre son objeto de las disputas entre los partidos y sus representantes cuando ponen en juego su rol y sus intereses.
Prácticamente el 2020 transcurrió con una caída en la actividad política en la población. Esto no excluye distintas manifestaciones y actividades pero sí exhibe un decaimiento general a raíz de la pandemia. Lo común es que durante el año pasado se diera una merma en la actividad de la militancia que va más allá de los clásicos meses del verano. Tomemos por caso nuestro agrupamiento político. No nos reunimos, aproximadamente, desde hace un año. Un verdadero testimonio de la pandemia.
Asimismo, otro reflejo del efecto parálisis es la disminución de la elaboración e intercambio de trabajos político-ideológicos cuya mengua es bastante notoria…
En tanto las situaciones que benefician al campo popular de parte del Estado, en lo fundamental, provienen del gobierno nacional de Alberto Fernández y el de Axel Kicillof en la prov. de Bs.As. Ambos generaron expectativas positivas al promover políticas favorables a los intereses de las grandes mayorías que revirtieron el nocivo legado de Macri y cia.
Reagrupar fuerzas e impulsar la acción política.
Las limitaciones para las reuniones, los barbijos y la distancia de 2 metros entre personas, ofrece un panorama ilustrativo de las dificultades que gravitan sobre las reuniones de los grupos y las concentraciones multitudinarias que se ven afectadas seriamente. Esa situación beneficia a la derecha que no se distingue por auspiciar reuniones multitudinarias. Les alcanza con el control de los principales medios de difusión masiva…
Algo que debiera potenciarse en lo inmediato es el intercambio de ideas y propuestas aplicadas a la actualidad. El empleo de las redes es un medio disponible que está súper activado y que permite estimular y desarrollar las conexiones. Evidentemente, el tejido socio-político está dañado por efectos de la pandemia. Por lo tanto, es necesario inyectarle nuevas energías para reactivarlo. Y esa tarea prioritaria convoca a la militancia política e ideológica del campo popular a cerrar filas y a concentrar esfuerzos para superar el transitorio freno pandémico.
En ese sentido, promover publicaciones y generar ideas acerca de la situación actual, es una ardua tarea más que necesaria. A tal fin proponemos lineamientos para la reflexión y la producción de un debate constructivo:
*) Ver a quiénes podemos invitar, de acuerdo a un criterio amplio, para el intercambio de ideas y la elaboración de propuestas.
*) Organizar el intercambio de ideas y el debate en lugar y fecha a definir.
*) Proponer temas ad referéndum del grupo.
*) Acordado el temario, definir propuestas político-ideológicas, objeto del intercambio.
*) Al arribar a conclusiones compartidas, ver qué cursos de acción política se pueden seguir para difundirlas e implementarlas.
Ahora esbozaremos un temario tentativo procurando definir el perfil de nuestro grupo:
Temario tentativo (a definir entre todos):
a) ¿Cuáles son los movimientos populares más destacados y qué vínculos tenemos o a establecer, en Latinoamérica y en el mundo?
b) ¿Qué movimientos políticos apoyamos en nuestro país y cómo evaluamos al gobierno de Alberto Fernández?
c) A qué organizaciones adherimos o deseamos relacionarnos a escala internacional y a qué nivel. Hoy, a qué países los vemos conducidos por sectores progresistas donde éstos integran el campo popular diferenciándose nítidamente de la derecha.
(")Síntesis biográfica:
Jorge Luis Cerletti nació en Buenos Aires en 1937, arquitecto. Fue profesor de Economía Política en la Universidad del Salvador y de Historia Social en la Facultad de Derecho de la UBA. Fue uno de los fundadores e integrante del grupo de reflexión La Mesa de los Sueños, también del grupo Repro (Reflexión y producción) y colaborador del CEPPAS, (Centro de políticas públicas para el socialismo). Producto de su dilatada militancia realizó numerosos ensayos políticos. Como coordinador de la colección Cuadernos de la realidad, dirigida por Raúl Sciarretta y editada por Granica, publico en ella tres ensayos: “Desarrollo industrial y concentración monopólica”, “La oligarquía terrateniente” e “Imperialismo y dependencia” (1974) y los siguientes libros: Retazos para una historia” (ficción 1983, Peña Lillo Editor); “El nuevo orden mundial, el socialismo y el capitalismo depredador” (1 991, Centro Editor de América Latina); sigue: “El poder y el eclipse del socialismo” (1993, Centro Editor de A.L.); “El Poder y la necesidad de un nuevo proyecto” (1994, Ediciones Mesa de los Sueños); “El poder bajo sospecha” (1997, edit. De la Campana) y “Las relaciones de dominio como lazo social (1999, edición del autor); “Políticas emancipatorias - crítica al Estado las vanguardias y la representación” (2003, edit. Biblos) y “Estado democracia y socialismo” (2014, edic. El jinete insomne, publicado por el ceppas, centro de políticas públicas para el socialismo).
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