domingo, 29 de noviembre de 2020

LA COVID EXIGE LA BIOPOLÍTICA por Frei Betto




 
            Antes de la pandemia, el mercado financiero determinaba la actividad política, incluso en el sector de la salud. Brasil es un caso típico. Desde 2016, cuando se aprobó la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) 95, que congeló por veinte años el presupuesto de la salud, los recursos de ese ministerio están en caída libre. (…) El gobierno no ha respetado la exigencia constitucional de dedicar a la salud al menos el 15% de los ingresos de la Unión. (Datos del Consejo Nacional de Salud).

A inicios de noviembre, el economista francés Robert Boyer lanzó su libro Les capitalismes à l’épreuve de la pandémie [Los capitalismos ante la prueba de la pandemia] (París, La Découverte), en el que analiza el impacto de la Covid-19. Descarta buena parte de la terminología empleada en los análisis económicos de la nueva anormalidad. No hay recesión, un fenómeno endógeno de los ciclos económicos, sino decisiones gubernamentales de restringir la actividad económica a lo esencial. Los gobiernos “congelaron” la economía. Los “planes de estímulo” son, de hecho, compensaciones a las empresas por los daños sufridos.

La economía pandémica ha demostrado que la tercera parte de la capacidad productiva no tiene un valor “indispensable”. Y provoca el descenso del nivel de vida medio. Hay caídas significativas del PIB y un mayor empobrecimiento, agravado por el desempleo.

En lo adelante la tendencia será el predominio de la economía de plataformas, protagonizada por GAFA (Google, Apple, Facebook y Amazon). En esa nueva economía, el repartidor de Amazon tendrá más importancia que un ingeniero aeronáutico. Será una economía de poco valor agregado, un nivel mediocre de calificación y reducidos aumentos de la productividad. Eso significa que la pobreza y la desigualdad social tienden a agravarse.

Antes de la pandemia, el mercado financiero determinaba la actividad política, incluso en el sector de la salud. Brasil es un caso típico. Desde 2016, cuando se aprobó el Proyecto de Enmienda Constitucional (PEC) 95, que congeló por veinte años el presupuesto de la salud, los recursos de ese ministerio están en caída libre. En 2019, la disminución fue de 20 mil millones de reales. En 2017, las inversiones en servicios públicos de salud representaron un 15,77% de la recaudación de la Unión. En 2019 descendieron al 13,54%. El presupuesto de 2017, del orden de los 142 mil 800 millones de reales, cayó a 122 mil 600 millones en 2019. En 2020 se produjo un ligero incfemento: 134 mil 800 millones. La PEC bloqueó 95 mil millones, a pesar de la pandemia. El gobierno no ha respetado la exigencia constitucional de dedicar a la salud al menos el 15% de los ingresos de la Unión. (Datos del Consejo Nacional de Salud).

La Covid-19 invirtió el rumbo de las cosas. Ahora es la salud la que determina el nivel de actividad económica del país. Por eso el mercado aguarda la vacuna como quien espera al Mesías. Solo entonces podrá decidir con seguridad dónde invertir sus billones de dólares y euros.

La nueva anormalidad tiene el lado positivo de que elimina cualquier hipótesis de privatización de la salud, aunque la propuesta venga disfrazada de SPP: Sociedad Público-Privada. El pánico en las bolsas de valores, la caída del precio del petróleo, la paralización de los préstamos bancarios y las inversiones, la flexibilización de la ortodoxia presupuestario son todos reflejo de un hecho nuevo: la salud pública, tan subestimada hasta febrero de 2020, ahora es una prioridad.

El supuesto dilema de los gobiernos –enfatizado por Bolsonaro--, salvar vidas humanas o la actividad económica (y en Brasil el gobierno optó por lo segundo) ha demostrado ser enteramente falso. Muchos gobiernos, como los de la Unión Europea, se consideraron capaces de gestionar el momento en que el perjuicio económico superara el precio de la vida humana salvada. Podían confiar en los científicos. Pero la Covid-19 demostró estar por encima de los conocimientos científicos. Cada nuevo virus presenta características nuevas.

Llevados contra las cuerdas del ring, los gobiernos se preguntaban qué hacer, ya que se dieron cuenta de que no es posible salvar la economía sin salvar a las personas. Aumentaron entonces las exigencias de confinamiento, lo que provocó una oleada de reacciones por parte de quienes sentían irrespetadas sus libertades individuales. Vino la flexibilización. El virus lo agradeció. Él, que se veía amenazado de extinción, encontró en las aglomeraciones una multitud de nuevos hospederos.

La extrema derecha ha explotado la segunda ola de la Covid-19 ante las nuevas medidas restrictivas. El miércoles 18 de noviembre salieron a las calles alemanas miles de personas con pancartas en las que se leía “¡Paren la mentira de la pandemia!”, “¡No a la vacunación obligatoria!”

Esos extremistas aprovechan la incomodidad causada por el confinamiento, en el cual muchos enfrentan la pérdida del empleo y la depresión, para robustecer sus banderas anticientíficas de supremacía blanca y odio a los inmigrantes. Quieren que los gobiernos no canalicen sus recursos hacia redes de protección social y sanitaria. ¡Que mueran los pobres! ¡Los ancianos! ¡Los desempleados! Como repite Bolsonaro, “la muerte es el destino de todos”.

Robert Boyer afirma que ya no se puede abordar la economía como en el período prepandemia. Y los gobiernos no tienen más opción que avanzar hacia la biopolítica: hacer de la preservación de vidas humanas y de la naturaleza su prioridad. Entonces quién sabe si la humanidad se dará cuenta de que no necesita de tanto confort, consumo e innovación tecnológica. Para ser feliz basta una vida digna con la garantía de los cuatro derechos humanos fundamentales: alimentación, salud, educación y cultura.


Frei Betto es autor, entre otros libros, de Diário de quarentena – 90 dias em fragmentos evocativos (Rocco). Librería virtual: freibetto.org


Frei Betto es autor de 69 libros, publicados en Brasil y en el extranjero. Puedes adquirirlos con descuento en Librería Virtual - www.freibetto.org Allí los encontrarás a precios más económicos y los recibirás en casa por correo.




Traducción de Esther Perez


Copyright 2020 – Frei Betto - 



QUIÉN ES FREI BETTO


El escritor brasileño Frei Betto es un fraile dominico. conocido internacionalmente como teólogo de la liberación. Autor de 69 libros de diversos géneros literarios -novela, ensayo, policíaco, memorias, infantiles y juveniles, y de tema religioso en dos acasiones- en 1985 y en el 2005 fue premiado con el Jabuti, el premio literario más importante del país. En 1986 fue elegido Intelectual del Año por la Unión Brasileña de Escritores. 

Asesor de movimientos sociales, de las Comunidades Eclesiales de Base, del Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra, y de la FAO, participa activamente en la vida política del Brasil en los últimos 50 años.


sábado, 21 de noviembre de 2020

¿QUIÉN LE COMPRÓ LA TIERRA A DIOS? Reforma agraria, necesidad de los pueblos por Adolfo Perez Esquivel



El sistema liberal se fue apoderando de las tierras, antes y ahora, excluyendo a las dos terceras partes de la población, concentrando el poder económico y político. La tierra fue y es eje de disputa, luchas y rebeliones, no es mi intención profundizar éste problema que duele en la vida de los pueblos. Quiero hacer referencia a hechos vividos donde la tierra es el centro de la vida o muerte de sectores campesinos, indígenas o pobladores que buscan donde vivir, son “los desheredados de la tierra”. Ciro Alegría escritor peruano en una de sus obras dice “El mundo es ancho y ajeno”· Hace años en el Nordeste de Brasil, acompañé a Dom Helder Cámara Arzobispo de Olinda y Recife a una favela en disputa por las tierras en las que estaban asentados desde hacía varios años; una empresa multinacional quería expulsarlos pidiendo su desalojo y llevaron el problema a los tribunales. En la gran sala del juzgado los micrófonos no funcionaban y el pueblo no escuchaba el debate entre los abogados y los jueces. Los pobladores prepararon dos grandes carteles preguntando a los jueces “¿Quién le compró la tierra a Dios?- La tierra es de quien la trabaja- Podría seguir señalando la situación de la tierra en todo el continente y en nuestro país, como el despojo a los pueblos originarios, los Mapuches, los Qom, Los Guaraníes, entre otras víctimas por el poder de turno. 

Los pueblos buscan alternativas para encontrar nuevos caminos como el MST- Movimiento de los Sin Tierra en Brasil, la producción de semillas orgánicas y no transgénicas, experiencia en muchos productores rurales, las Comunidades campesinas en Paraguay, Guatemala, Las Ligas Agrarias en Argentina y organizaciones como el MOCASE, MOCAFOR y el MAN, entre otros movimientos campesinos. Las desigualdades sociales e injusticias se profundizan y ponen en riesgo los DDHH y la democracia. El 29- 10-20 fue un día triste se manifestó en la toma de tierras en Guernica, los pobres buscaron un lugar donde poder levantar sus viviendas, siendo desalojados por la fuerza policial con 4 mil efectivos en forma violenta, cortando la luz, lanzaron gases lacrimógenos, balas de goma, incendiando las casillas precarias de los pobladores, algunos se quedaron y resistieron con gomeras, piedras y palos. La orden judicial fue desalojarlos sin tener en cuenta los niños/as, ancianos, mujeres, víctimas de la violencia policial y judicial. Es cierto que el gobierno de la provincia buscó el diálogo para resolver la situación con apoyo económico y la promesa de encontrar otro lugar dónde levantar sus viviendas, el enfrentamiento con la policía dejó como saldo 40 detenidos. 

Varios organismos de DDHH enviaron veedores para evitar la violencia policial entre ellos la CPM, el CELS, el SERPAJ, la APDH de la Matanza. Buscando dialogar con las autoridades y que no utilicen la violencia contra los pobladores considerando la cantidad de niños/as, mujeres y ancianos Los pobres son excluidos del sistema y víctimas de la represión, hubo sectores del periodismo canalla, señalando que eran delincuentes troskistas, no victimas de una situación injusta del sistema, levantando en los programas periodísticos la defensa de la propiedad privada y guardan silencio sobre el uso y abuso de los terratenientes que compran lo que no les pertenece, podemos comprobarlo en el ayer y el hoy. La pregunta es ¿Cómo puede ser que en el país empresas extranjeras compren grandes extensiones de territorio expulsando a los pueblos originarios y campesinos en la Patagonia?, ¿ Cómo puede ser que la empresa Benetton sea dueña de un millón de hectáreas?- otras empresas como Lewis, Turner poseen otras tantas. Las empresas mineras, los monocultivos de los terratenientes; de que propiedad privada hablan?- los medios de comunicación guardan silencio cómplice . 

Vuelvo a la pregunta de los pueblos ¿Quién le compro la tierra a Dios? Los pobres, los campesinos, los pueblos originarios son expulsados y violentados sin defensa alguna. La CPM- Comisión Provincial por la Memoria es un ente autárquico oficial que aporta su trabajo en defensa de los DDHH, sus integrantes son ad honoren. Otro hecho que sacudió la vida y conciencia del pueblo fue en la Provincia de Entre Ríos donde la señora Dolores Etchevehere generosamente ofreció al Proyecto Artigas tierras para desarrollar proyectos productivos orgánicos actitud que desató la furia de sus hermanos, un problema familiar que llegó a los tribunales, los jueces decidieron que el derecho de las tierras correspondía a los hermanos de Dolores. Los integrantes del Proyecto Artigas con Juan Grabois se retiraron de la estancia. Es un capitulo no cerrado que tiene que aclararse ante la justicia y rendir cuentas de la discriminación de género a Dolores quien denuncia el vaciamiento de las empresas familiares. 

Las tensiones vividas esos días en distintos contextos llevó a la superficie el debate muchas veces silenciado sobre la reforma agraria y la propiedad privada. La propiedad debe estar en función social, lo que significa que toda persona tiene derecho a la propiedad individual y que el Estado debe asegurar. Estoy de acuerdo con Juan Grabois que el país necesita de una reforma agraria, la distribución justa y el derecho a las 3 TTT- tierra- techo y trabajo. Debe ser política de Estado proveer la distribución justa y protección de los recursos naturales deben cumplir una función social y no confundir desarrollo con explotación.

Es necesario lograr el equilibrio entre las necesidades del ser humano y el respeto a la Madre Tierra, lamentablemente violentada por la especulación financiera, los desmontes, quema y destrucción del medio ambiente con agro-tóxicos provocando graves daños y contaminación del agua y la tierra, por la megaminería, los monocultivos y la quema de la floresta como en la Amazonía, Australia, Argentina y diversos países.

La pandemia del Covid 19 que afecta al mundo ews la consecuencia del daño que el ser humano provoca a la Madre Tierra; si no se restablece el equilibrio y continúa la explotación y devastación actual el mundo se dirige a un suicidio colectivo. Los indicadores están a la vista, calentamiento global, contaminación, los agro-tóxicos y destrucción de la biodiversidad. 

La otra pandemia que avanza peligrosamente es el “hambre”. El mundo produce alimentos suficientes para superar el hambre pero hay más hambrientos. Josuè de Castro decía que el hambre es la manifestación biológica de una enfermedad sociológica. La forma de enfrentar el hambre antes que sea tarde es la soberanía y seguridad alimentaria que está en el pequeño y mediano productor rural, no en las grandes empresas agrícolas, ni en los transgénicos. Es urgente avanzar con políticas públicas en la solución alimentaria y restablecer el equilibrio con la Madre Tierra y la producción orgánica, el desafío es volver a las fuentes. 

La Argentina es un país productor de alimentos, con territorio suficiente y de gran biodiversidad, pero hay grandes sectores del pueblo con hambre, imposibilitados de tener los recursos básicos para sus vidas. La desigualdad social se profundiza y hay que buscar caminos superadores de la profunda crisis que viven los pueblos.

sábado, 14 de noviembre de 2020

REDES Y COMUNISMO por Pedro Cazes Camarero(") para Vagos y Vagas Peronistas

 


La manera técnica de comunicarse entre los nodos de una red (por ejemplo internet) es la CONDICION DE POSIBILIDAD de la red. Si no hay lenguaje articulado entre los miembros de una partida de caza paleolítica ésta no puede existir. Pero la red no es ni está constituida por la manera técnica de relacionarse entre los nodos de la red. La red está constituida por los nodos mismos y la propia relación existente entre los nodos. 

En una sociedad fordista, efectivamente hay una red pero es una red centralizada alrededor del nodo burgués por los nodos obreros. Según el marxismo clásico la liquidación revolucionaria del capitalismo fordista se efectúa reemplazando las red centralizada de la sociedad fordista, que es la dictadura de la burguesía, por otra red, también centralizada, que sería la dictadura del proletariado. Pero eso no reemplaza al fordismo, esto es, no liquida al capitalismo. El salario, el dinero y la legislación, esto es, la forma jerárquica de relación entre las personas, sigue vigente. La dictadura del proletariado es una forma política de dominación en el marco del fordismo y del modo de producción capitalista. El modo de producción capitalista se conserva, aunque sea gestionado por el Estado. 

La propuesta alternativa, la democracia del común, solamente puede ponerse en práctica en un marco social más avanzado, el postfordismo, pero depende del desarrollo siempre revolucionario de las fuerzas productivas. Llegado a un punto determinado de crecimiento de la composición orgánica del capital, la avanzada composición técnica de éste permite dar el salto. Emerge el postfordismo con la organización de la vida humana entera alrededor de la informática. Sin la tecnología informática avanzada no puede haber postfordismo. Y sin postfordismo, no puede haber democracia del común. 

En la sociedad contemporánea la telefonía celular es ubicua y aunque un trabajador realice una actividad “atrasada” por ejemplo algún tipo de trabajo físico, su vida se halla organizada por el celular, la factura bancaria de la luz, la tarjeta “SUBE” con la que se desplaza, etc. 

En una palabra, provisionalmente el desarrollo desigual de la técnica se mantiene pero ya la forma superior, informática, domina completamente el escenario. La subjetividad de las personas, en las nuevas generaciones sobre todo, se ve conformada por el rol creciente de la nueva técnica, que no es sólo comunicacional, sino que va involucrando crecientemente la propia vida. Advirtamos, sin embargo, que una vez constituida la nueva subjetividad postfordista, ella ya no depende de modos técnicos de constitución de la red. Éstos se dan por sentado como naturales, porque sin ellos, sin cajeros automáticos, facturas electrónicas, horarios digitales, etc. no es viable el propio sistema capitalista postfordista. La arquitectura informática es robusta, porque los caminos para intercambiar la misma información o coordinar cualquier actividad son múltiples e intercambiables. De ese modo, sin embargo, también se articula la nueva subjetividad postfordista. Las relaciones entre los nodos pueden efectuarse por vía electrónica, por escrito e incluso por vía verbal. Vías técnicamente arcaicas pero viables. Ya deja de importar la forma de comunicación sino entre quiénes se están comunicando. 

Si las subjetividades son fordistas, por ejemplo durante las décadas de mediados del siglo XX, no importa si la transmisión de los discursos son electrónicas o no: siguen siendo 100 % capitalistas. Ahora pasa exactamente lo mismo, pero al revés: si las subjetividades son post- fordistas, no importa que nos corten Internet (y eso será solo por un rato, porque sin informática colapsa el sistema, por lo cual deberán devolverla): a través de la base papel o por telefonía de línea, por señas o con birome en la pared, las subjetividades postfordistas continuarán siéndolo. Para la red postfordista, constituida en el seno de la dictadura de la burguesía, ésta se convierte en una opresión intolerable. Opresión política, pero también estructural. 

Es el momento de la democracia del común. Lo contrario de la dictadura de la burguesía ha dejado de ser la dictadura del proletariado (o sea más dictadura) sino la democracia. Y lo contrario de la burguesía ha dejado de ser el proletariado, ya que para que deje de haber amos es preciso que se extingan los esclavos: el escenario es ocupado por el común.

(") Pedro Cazes Camarero, argentino, farmacéutico, 1945. Magister Scientiae en Metodología de la Investigación Científica y Epistemología. Ex director de "Estrella Roja" (órgano del Ejército Revolucionario del Pueblo- ERP-), "El Combatiente" (órgano del Partido Revolucionario de los Trabajadores - PRT-) y "Crisis". Autor de numerosos artículos y libros, entre ellos "Las Estrategias de la Aurora", de próxima aparición (Ed. Prometeo, Buenos Aires, 2019). Premio "Ramón Carrillo" (2010). Miembro del Encuentro de Profesionales contra la Tortura. Columnista de "Cuadernos de Crisis/Purochamuyo".

















































sábado, 7 de noviembre de 2020

CAMBIA, TODO CAMBIA por Jorge Luis Cerletti para Vagos y Vagas Peronistas

 


Con bastante frecuencia ocurre que al poco tiempo de producidos algunos cambios socio-políticos importantes, los naturalizamos de modo tal que se pierde de vista la historia de su alumbramiento. Tal el caso del voto femenino que recién se sancionó en 1947, gracias al impulso y la gestión de Evita. Hoy, que la lucha del feminismo ha alcanzado mucha fuerza y relevancia enriqueciendo el espectro de las luchas libertarias, vale recordar que sólo transcurrieron 73 años desde que se sancionó aquella ley de sustantiva importancia política-social-personal y pareciera que existió siempre… 

En política, a partir del golpe del Tte. Gral. Uriburu en 1930, se sucedieron los gobiernos conservadores. Sin embargo, el 17 de Octubre de 1945 se produjo el triunfo de los descamisados cuya multitudinaria movilización logró rescatar a Perón de la Isla Martín García. Así se abrió una etapa trascendente del movimiento popular. Luego, la asonada militar de Aramburu y Rojas derribó el gobierno de Perón en 1955 y se sucedieron distintas dictaduras militares hasta que en 1983 se inauguró el actual proceso democrático. En todo aquel período las luchas populares tuvieron altibajos y sufrieron diversas formas de represión. Esas luchas incluyeron experiencias guerrilleras, movilizaciones de masas y también algún proceso eleccionario. Éstos variaron desde de la proscripción del peronismo a su legalización. Y en la última etapa de vigencia electoral, se desarrolló el kirchnerismo (identificado con el peronismo) que abrió un nuevo mapa político en nuestra nación.

Mas, ahora surgió algo inédito por fuera de la política que influyó sobre ella: el Coronavirus. O sea, un fenómeno natural que sacudió a nuestro país y al mundo. Ha cambiado hábitos, generó aislamiento y produjo muchas muertes. En suma, incidió e incide en la vida de la sociedad en su conjunto 

El aislamiento.

La Pandemia provocada por el Coronavirus es “democrática”, alcanza a todo el planeta. En general, los recursos que moviliza son directamente proporcionales al nivel económico y al poder de las naciones que lo padecen. No obstante, hasta que no se cree la vacuna contra el Coronavirus (se prevé para principios del año próximo) no finalizarán el aislamiento, los trastornos y la proliferación de víctimas.

En la vía pública se exige el uso del barbijo y guardar la distancia mínima de 2 metros entre personas. Pero lo peor es el enclaustramiento que no sólo dejó sin trabajo a muchos sino que afecta sensiblemente las relaciones sociales. En general, demanda la limitación del número de personas en cualquier reunión con inclusión de las familiares, evitando así reuniones numerosas. Ese sustantivo cambio en los hábitos introdujo una alteración en las costumbres y ha limitado sensiblemente las reuniones y las manifestaciones públicas. No obstante, existen negadores de semejante situación. Es el caso de jerarcas políticos egocéntricos y reaccionarios como Trump y Bolsonaro, con sus desplantes personales y políticos, pero sobre todo, hay que sumar la práctica de “rebeldía” de activos provocadores de la derecha. 

Las restricciones para preservar la salud, operan sobre el conjunto de las sociedades y se refleja en la actividad política. En el Parlamento y en otros ámbitos destinados a encuentros de diversos funcionarios, tienden a suplirse las reuniones personales y realizarse a través del zoom y videoconferencias. En ese sentido, el desarrollo tecnológico favorece el funcionamiento de organismos públicos que pueden seguir sorteando limitaciones de importancia. Hoy, esos cambios están incorporados en la sociedad. Del mismo modo, muchas actividades artísticas, educativas, o conexiones de diversa índole afectadas por la pandemia, emplean formas de sustitución. Como ser, suplir la asistencia a los espectáculos en vivo (deportes, teatros, etc.) por su visualización en video. Y aunque esto implique la carencia de público en vivo, permite la continuidad de las correspondientes actividades con la asistencia de público virtual… 

Ahora bien, respecto de las movilizaciones políticas populares se verifica una previsible disminución. No sólo porque el gobierno concita una adhesión amplia y prohíbe sanitariamente reuniones numerosas, sino también porque la pandemia tiende a crear un clima social de encierro. Lo cual no obsta a que, en la vereda de enfrente, factores de poder opuestos al gobierno desafíen las prohibiciones. Por ejemplo, se produjo el paro de la policía de la Prov. de Bs. Aires exigiendo el aumento de sus haberes. Y lo que es más grave, en agresiva y amenazante señal de desacato, se movilizó rodeando la Residencia Presidencial de Olivos. 

La post pandemia.

No son pocos los interrogantes en torno a los efectos de la pandemia. En cuanto a la duración, su final se relaciona con la gestación y distribución de la vacuna. Existen varios competidores en una carrera en la que la salud se liga con el beneficio económico… Se ha difundido que en los primeros meses del año próximo se podrán realizar campañas generales de vacunación. Esto supone la superación de la pandemia del Coronavirus. Sin embargo, hoy las secuelas del paro forzoso sobre muchas actividades, los alcances de los daños y la merma de ingresos de los sectores afectados, son tan perjudiciales como difíciles de sobrellevar en estas circunstancias.

En suma, un fenómeno natural ha originado una anomalía colectiva de víctimas y “reclusión” muy extendidas que alcanzan a toda la humanidad y que altera la vida en las distintas sociedades. En situaciones de ese tipo crece la importancia del rol del Estado y se visualiza fácilmente la eficiencia de las diversas gestiones. Las numerosas muertes y contagios acaecidos en las poblaciones de EE.UU y de Brasil dan un lamentable testimonio sobre las falencias de sus respectivos gobiernos. Digamos que los casos fatales en esos países son muy elevados y exhiben las carencias de la política sanitaria para amplios sectores populares, muy descuidados en ambas naciones. 

El esfuerzo solidario del personal de sanidad, con riesgo incluido, contrasta con la desidia de muchos gobiernos de la derecha. Y el problema recae tanto en la cantidad de contagios como en la disponibilidad de respiradores para atender a los contagiados. La relación Coronavirus-recursos disponibles muestra variadas dificultades. 

En definitiva, plantear la post pandemia equivale al desarrollo y gestación de las vacunas contra el Covid 19 y su consiguiente aplicación a la comunidad. Acerca de los daños y perjuicios a la salud y lo social hay que remontarse a lo que significó la proliferación de la “gripe española”. 

La problemática hoy se asocia a los efectos de la cuarentena y el aislamiento que se reflejan en las políticas de este momento. En ese sentido, prevalece el distanciamiento social precautorio que constituye un serio obstáculo para las manifestaciones colectivas. Sin embargo, los procesos resultan una fuente de donde emergen imprevistas situaciones en el escenario político. Y a propósito del mismo, una fecha cargada de historia y simbolismo resurgió tiempo atrás.

El 17 de Octubre. 

Este nuevo aniversario tuvo gran repercusión. Colapsaron las redes sociales y las calles céntricas se poblaron con gran cantidad de vehículos en manifestaciones populosas que adherían a la conmemoración sorteando el problema del enclaustramiento. En rigor, constituyó un inesperado hecho político dadas las condiciones actuales.

Se pudo apreciar entonces la vigencia que sigue teniendo el peronismo en la Argentina. Han transcurrido 75 años de la histórica jornada de 1945, la fecha de su consagración político-social y hoy, en circunstancias tan extrañas, vuelve a concitar una fuerte adhesión popular con todos los matices que se quiera. Sabido es que a lo largo de su historia cohabitaron en su seno desde sectores de ultra derecha hasta sectores de izquierda radicalizada, fenómeno que se refleja en sus distintos momentos político-ideológicos. Baste comparar la nefasta figura de José López Rega con John William Cooke, líder del ala izquierda del peronismo. No obstante, la profunda raigambre popular del movimiento lo caracteriza y destaca dentro del conjunto de las fuerzas políticas nacionales. 

¿Qué alcances tiene este rebrote de adhesión al peronismo? ¿Podrá proyectarse en movilizaciones que motoricen las reivindicaciones y demandas? ¿O el peso de la prensa gorila y del poder antipopular la reducirá a una efemérides inocua e intrascendente? Y más grave aún, las limitaciones internas del propio campo. Aquí las preguntas se asocian a las exigencias emanadas de la problemática política actual. Porque trasciende ampliamente la estrechez de miras de la dirigencia política y apunta al vacío de una política emancipatoria que cuestione a fondo la vigencia del capitalismo y de sus poderosos gestores…

“Todo cambia” menos la necesidad de una política liberadora.

Enfrentar al poder del gran Capital y de sus Corporaciones es complejo y nada fácil pero tampoco es imposible. Conlleva una metodología de construcción de una política que demanda protagonismo con sus tiempos y el objetivo de la liberación nacional.

Contamos con valiosos cuadros, diversas experiencias y hoy un gobierno surgido del ámbito popular por más condicionado que esté. Es hora de propiciar un gran debate dentro del campo del pueblo de todos los que aspiramos y proponemos que la independencia nacional se consolide en los hechos. Donde proliferen las ideas, se esfume el sectarismo y se desarrollen las movilizaciones populares. O sea, que se potencie la creatividad y la praxis que haga irreversible nuestra independencia. Tras ese objetivo es necesario hacer un gran esfuerzo por la unidad en la diversidad para que el proceso de construcción se vaya realizando. Debemos partir de la base de que el núcleo del poder enemigo consiste en la vigencia y hegemonía del gran capital interno e internacional. Si no reconocemos la presencia e incidencia de semejante enemigo, mal podremos destruir ese poder. Tarea insoslayable para quienes impulsamos la liberación nacional sin marchas y contramarchas que la transformen en una ensoñación.