sábado, 3 de enero de 2015

GASPARIN Y SU CONJUNTO, EL 31 DE DICIEMBRE EN EL CLUB COMERCIO, por Claudio Javier Castelli

Así anunciaban los autoparlantes recorriendo toda la ciudad de La Paz, Entre Ríos, desde principios del 60, hasta entrados los setenta, los fines de año.También actuaba el 24 de Enero, el día de la Virgen, patrona de la ciudad. Iba todo el pueblo, era una fiesta de un acordeón finísimo que sonaba como una orquesta sinfónica, cuando los parlantes no tenían los adelantos tecnológicos que tienen ahora.

Pero sobre todo era una fiesta popular, intrínsecamente peronista. Muchos, sin embargo, elegían el boliche "Grisú", sobre todo, los "progresivos", que escuchaban lo último del rock inglés y norteamericano, que revolucionaba la música en aquel entonces.
Honestamente yo iba encantado al baile popular, era un acordeón para el Teatro Colón: paso doble, tango, cumbia, folclore, la música del pueblo.



¿Qué habrá pasado entre ese acordeón maravilloso, y la cumbia villera de hoy, pasando por los Wawancó, "el polaco" y Karina.
Cuando vine a la Buenos Aires de la dictadura, y me instalé en Belgrano y Barrio Norte, cómo explicarle a mis amigos, que eran buenos los Beatles, los Rolling, pero a mí me gustaba Mercedes Sosa, Los Tucu Tucu, el tango y todo lo que tocaba Gasparín, que era un desconocido acá.

No se escuchaba el rock nacional en las radios de la dictadura, solamente música en inglés. No teníamos en esa época inglés desde la primaria como ahora, en el bachillerato solamente y se podían elegir dos idiomas. Como no me gustaba la profesora de primer año, porque tenía fama de brava, me anoté los tres primeros años en francés, y solo los dos últimos hice inglés. No sabía inglés, no podía reconocerme en las canciones, solo las tarareaba como el personaje de Capussotto. Me gustaba Gasparín. En las discotecas de Buenos Aires, me hablaban de un fantasma, y no conocían al artista. Pero todo el interior del país lo conocía. 

El rock nacional irrumpió con Malvina, en una semicolonia es así.

En youtube, desde hace muy poco se puede conseguir discos de vinilo de Gasparín, hay uno entero, lados uno y dos, "lo mejor", he pasado noches enteras escuchando ese intenso y virtuoso ejecutor del acordeón. Hoy podemos compararlo, aunque más clásico, con Raul Barboza o el Chango Spasiuk.

Interpreta el tango "LLuvia de estrellas", que pertenece a los tangos fantasía de Osmar Maderna, un adelantado del tango, que increíblemente le quitó en los tres tangos fantasía que hizo ("LLuvia de estrellas", "Concierto en la luna" y "Escalas en azul"), el tono nostálgico habitual del tango, pero Maderna era un pianista eximio, esos tres tangos solo lo pueden interpretar virtuosos: Gasparín uno de ellos.

En el lado uno también interpreta "Noche de carnavales", la antigua canción folclórica del "Chango" Rodríguez, que se remonta a mi primera infancia, "en una noche de carnavales yo la conocí", seguramente debo haber escuchado las versiones de Horacio Guarany y el Chango Nieto, que son las más antiguas, principios de los sesenta.

Otra interpretación antológicas son los pasodoble: "España cañi", "La Estudiantina", "La Virgen de la Macarena", también el afamado "Pasodoble te quiero". Creo que lo primero que aprendí a bailar en mi pueblo fue el Chamamé y el pasodoble. No me entendía con Led Zeppelin, perdón rockeros.

Una canción litoraleña que hacía furor en los sesenta y setenta: "Acuarela del Río", por supuesto que la versión de Ramona Galarza, y Los fronterizos. Pero Gasparín ¡cómo la tocaba!

Cuando la dictadura prohibió los carnavales (Gasparín venía a La Paz, también para los carnavales), se fue esfumando mucho de la pasión popular por esos bailes, cuánto disfruto hoy la restauración de los feriados.

Muchos años después, cuando el país de la juventud, era un "instante, que ahora emerge aislado" (Borges), me crucé en Tribunales, ya abogado, con alguien que podría ser Gasparín, lo seguí, lo paré, nos emocionamos juntos "¡Qué hermoso pueblo!", dijo. Ya no tenía orquesta, y tocaba menos.

También por esos años (1974/75) se estrenó en La Paz, en el Cine Urquiza, la película de Fellini, "Amarcord", ¡cuánto había del pueblo de La Paz en esa película!.

También en otro film de Fellini, más antiguo, "Los inútiles". Allí hay una escena en que los protagonistas siguen bailando al compás de una trompetita, cuando el baile había terminado, todos disfrazados, al amanecer. Algo de esa escena, representamos todos los cincuentones hoy.

Gracias Julio Erman, por ese acordeón maravilloso, y por los más lindos y divertidos años de mi vida.

¡Este 31 de Diciembre, voy a Comercio!.

https://www.youtube.com/watch?v=MatIu_hXn80 

https://www.youtube.com/watch?v=JNvY96D9l18 

4 comentarios:

  1. hola, está muy buena esta nota... parece un personaje entrañable

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    1. Personaje extraordinario. La orquesta de Gasparin sonaba mejor que la orquesta de Feliciano Brunelli, que hacía furor acá en Buenos Aires, en los bailes populares, se les llamaba Orquestas características. Pero Brunelli, tocó junto a orquestas típicas hasta principios de los sesenta. En el interior Gasparín siguió hasta fines de los 70.

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  2. No lo vi personalmente, pero disfruto mucho sus grabaciones. Y sabía interpretar música clásica en acordeón

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  3. chuny? no puedo creer encontrarme con estas palabras! Siempre me resultó difícil encontrar que alguien de La Paz tuviera sensibilidad peronista¡ Mis abuelos vivían frente a tu casa. Una alegría

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